martes, 20 de mayo de 2014

HUYENDO DEL AMOR ROMÁNTICO.

Se ha demostrado la importancia otorgada en nuestro entorno al modelo de amor romántico, la aceptación de los mitos al respecto y, al mismo tiempo, está teóricamente establecido el papel de dichos mitos en el mantenimiento de las relaciones de pareja violentas.

 Algunas de las ideas que aparecen como más características de lo que el amor romántico implicaría para los miembros de la pareja son; 

- Entrega total a la otra persona.
- Hacer de la otra persona lo único y fundamental de la existencia.
- Vivir experiencias muy intensas de felicidad o de sufrimiento.
- Depender de la otra persona y adaptarse a ella, postergando lo propio.
- Perdonar y justificar todo en nombre del amor.
- Consagrarse al bienestar de la otra persona.
- Estar todo el tiempo con la otra persona.
- Pensar que es imposible volver a amar con esa intensidad.
- Sentir que nada vale tanto como esa relación.
- Desesperar ante la sola idea de que la persona amada se vaya.
- Pensar todo el tiempo en la otra persona, hasta el punto de no poder trabajar, estudiar,    comer, dormir o prestar atención a otras personas menos importantes.
- Vivir sólo para el momento del encuentro.
- Prestar atención y vigilar cualquier señal de altibajos en el interés o el amor de la otra persona.
- Idealizar a la otra persona no aceptando que pueda tener algún defecto.
- Sentir que cualquier sacrificio es positivo si se hace por amor a la otra persona.
- Tener anhelos de ayudar y apoyar a la otra persona sin esperar reciprocidad ni gratitud.
- Obtener la más completa comunicación.
- Lograr la unión más íntima y definitiva.
- Hacer todo junto a la otra persona, compartirlo todo, tener los mismos gustos y apetencias.

Obviamente estamos frente a un conjunto de ideas y creencias irracionales y mitos, frente a un modelo de conducta imposible de seguir y, por tanto, que fácilmente desembocará en desengaños y frustraciones.