"Las agresiones por Violencia de Género y violencia Familiar examinadas por los forenses del Instituto Vasco de Medicina Legal, experimentaron incrementos del 4,22 y del 25,91 %, respectivamente, en 2012 mientras que las de tipo sexual disminuyeron un 28,38 %, según los datos recogidos en la memoria del pasado año"
Merece la pena tomar esta noticia como indicativo que sirva para erradicar la idea que desde ciertos colectivos intentan instaurar aprovechando la disminución de denuncias interpuestas por caso de Violencia de Género en el último año. Como bien muestra este estudio de un órgano oficial, los casos de este tipo de violencia así como los producidos dentro del núcleo familiar que no correspondan a VdG, se han incrementado durante el transcurso del año pasado.
No podemos consentir que las carencias que derivan de una crisis económica nacional y mundial, que obliga a multitud de víctimas de esta violencia a permanecer ancladas, aún más si cabe, a quien les produce dicha agonía, oculte la realidad de las cifras del horror, que año tras año dejan un número de víctimas mortales aberrante y un número elevadisimo de denuncias, que bajo ningún concepto expresa la verdadera magnitud de esta lacra encubierta por tantos intereses políticos y sociales.
La realidad es que la VdG no disminuye considerablemente, la realidad es que todas las semanas comemos, presenciando en el telediario sensacionalista de turno, como se ha asesinado a otra mujer por el grave hecho de ser mujer, la realidad es que, por desgracia, esa noticia no nos quita el hambre, es que la costumbre nos esta haciendo minimizar la trascendencia del hecho, normalizando los asesinatos de mujeres en manos de sus parejas o ex parejas hombres, hasta el punto que inconscientemente adaptamos nuestras creencias a las falacias que pretenden vendernos quienes andan detrás de asentar los sistemas sociales patriarcales que defienden y ensalzan el maltrato a la mujer como un signo de coherencia social, de una coherencia dentro de un sistema incoherente, ilógico e inhumano.
La VdG dentro de las relaciones sentimentales heterosexuales sigue siendo uno de los mayores problemas sociales que padece nuestra sociedad, nuestro país y cualquier otra sociedad mundial que pretenda ser considerada una sociedad civilizada, igualitaria, humana y razonable..., hasta que no se consiga erradicar cualquier acto de violencia ejercido sobre la mujer por el hecho de serlo, hasta que no se consiga dejar de confundir paridad con igualdad, hasta que no se consiga erradicar estereotipos sexistas que anclan a las mujeres en roles y estatus sociales inferiores a los del hombre, hasta ese día... la lucha no podrá decaer, deberán de existir voces que recuerden a diario la vergüenza encubierta de la realidad machista de un país, de este país...hasta entonces mi voz seguirá expresándose.
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